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¿Cómo nace el Protocolo de Kioto?
El Protocolo de Kioto fue creado para reducir las emisiones de gases de efecto (GEI) invernadero que causan el calentamiento global. Es un instrumento para poner en práctica lo acordado en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
¿Cuándo y dónde se firmó el Protocolo de Kioto?
El protocolo fue adoptado el 11 de diciembre de 1997 en Kioto, Japón, pero no entró en vigor hasta el 16 de febrero de 2005. En noviembre de 2009 eran 187 los estados que lo habían ratificado. Estados Unidos que, al momento de la firma del protocolo el mayor emisor de gases de invernadero, nunca lo ratificó.
¿Cuándo fue el Protocolo de Kyoto?
2005
Ratificado por los 33 países de América Latina y el Caribe, el Protocolo de Kyoto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático entró en vigor en el 2005.
¿Cuándo entró en vigor el protocolo de Kyoto?
La Convención entró en vigor en 1994, y ya en 1995 los gobiernos habían iniciado negociaciones sobre un protocolo, es decir, un acuerdo internacional vinculado al tratado existente, pero con autonomía propia. El texto del Protocolo de Kyoto se adoptó por unanimidad en 1997.
¿Cuáles son los países que podían retirarse del protocolo de Kyoto?
Bielorrusia, Kazajistán y Ucrania declararon que podían retirarse del Protocolo de Kyoto o decidir no poner legalmente en vigor la Enmienda con los objetivos de la segunda ronda. Japón, Nueva Zelanda y Rusia habían participado en la primera ronda de Kioto, pero no asumieron nuevos objetivos en el segundo período de compromiso.
¿Qué es el protocolo de Kioto?
En 1997, la Unión Europea y sus Estados Miembros asumieron, en el ámbito del primer periodo de compromiso del Protocolo de Kioto (2008-2012), la obligación de reducir dichas emisiones en un 8\% respecto al año base (1990/1995).
¿Cuáles son los mecanismos de ratificación del protocolo de Kyoto?
Se han establecido varios mecanismos con este fin (véanse los apartados sobre “comercio de derechos de emisión”, el “Mecanismo para un desarrollo limpio” y la “aplicación conjunta”. El Protocolo de Kyoto ha avanzado lentamente: se encuentra todavía en lo que se conoce con el nombre de “fase de ratificación”, y es un acuerdo complicado.