¿Cuándo podar Pitaya?
Poda de producción: Esta poda se suele realizar a partir del tercer año de la plantación. Consiste en la eliminación de las vainas improductivas situadas en la parte inferior del tallo principal.
¿Cómo hacer florecer las pitahayas?
Las pitahayas florecen en verano durante el periodo de lluvias y pueden ocurrir entre cuatro y siete ciclos de floración en un periodo de 8 meses (Pushpakumara et al., 2005).
¿Cómo se cuida la pitaya?
Utiliza tierra de buen drenaje y arenosa, como para cultivar cactos. Después de todo, esta planta es técnicamente un cacto, así que no querrás utilizar tierra húmeda y lodosa. La pitaya no requiere demasiado alimento ni nutrientes. Plántala en un lugar de tu jardín donde el agua no se empoce normalmente.
¿Cuándo florece la boca de dragón?
Florece desde la primavera al otoño, mejor en climas templados, aunque se adapta bien a las zonas de sol. El antirrhinum majus también se conoce como Dragonaria o Boquilla de Dragón, Antirrino, Conejillos, Morro de Lobo, Flor de Sapo, Pan y Queso, Zapaticos de la Virgen, Tarasca de Jardín o Gallitos, entre otros.
¿Cómo saber si la pitahaya es blanca o roja?
Características de la pitahaya.
- Pitahaya amarilla: De color amarillo y con espinas . Tiene un mayor contenido en azúcar, por lo que su sabor es más dulce.
- Pitahaya roja: A diferencia de la variedad amarilla, no tiene espinas sino brácteas. Tiene un tamaño ligeramente superior y una corteza más dura.
¿Cuántas veces se riega la pitahaya?
Se recomienda aplicar en cada riego al menos 1litro/gotero (un riego semanal en invierno, dos en primavera y otoño y tres riegos semanales en verano).
¿Cuándo se poliniza la pitaya?
Las flores de pitaya que se abren por la noche deben polinizarse al día siguiente.
¿Cómo cuidar pitahaya en maceta?
jpg. Elegir la tierra es muy sencillo, al final la pitahaya es una especie de cactus, así que solo necesita tierra arenosa y con buen drenaje. No requiere muchos nutrientes y menos un riego excesivo; puedes estar en paz. De igual manera la maceta debe tener agujeros lo suficientemente grandes para drenar bien el agua.