Cuando se descubrio la cueva de Chauvet?

¿Cuándo se descubrio la cueva de Chauvet?

El domingo 18 de diciembre de 1994, en el circo de Estre, Jean-Marie Chauvet llevó a dos de sus amigos, Éliette Brunel y Christian Hillaire a los barrancos: una ligera brisa de aire que salía de un pequeño agujero al fondo de una cueva les llamó la atención y decidieron salir de dudas.

¿Cómo se descubrio la cueva Altamira?

1868
La entrada a la cueva de Altamira, situada a dos kilómetros del municipio cántabro de Santillana del Mar, fue descubierta en 1868 por un tejero asturiano llamado Modesto Cubillas. En un día de caza liberó a su perro, atrapado entre las grietas de unas rocas cuando perseguía a una presa, y dio con la entrada.

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¿Quién descubrio la cueva de Chauvet?

La cueva fue explorada por primera vez el 18 de diciembre de 1994 por un trío de espeleólogos: Éliette Brunel-Deschamps, Christian Hillaire y Jean-Marie Chauvet, de quien tomó el nombre.

¿Cuáles fueron las primeras pinturas de la historia?

Seis pinturas rupestres de la Cueva de Nerja (Málaga) que representan a varias focas podrían tener una antigüedad de al menos 42.000 años, lo que las situaría como la primera obra de arte de la humanidad, que además no habría sido realizada por sapiens, sino por neandertales, según varios expertos.

¿Quién visitó la Cueva del Sur?

Acompañado por Cubillas, Marcelino Sanz de Sautuola visitó por primera vez la cueva en 1875 y reconoció algunas líneas que entonces no consideró obra humana. En la Exposición Universal de París conoció de primera mano algunos objetos prehistóricos encontrados en cuevas del sur de Francia.

¿Quién descubrio la cueva de la libertad?

La cavidad fue descubierta por un lugareño, Modesto Cubillas, hacia el año 1868. Acompañado por Cubillas, Marcelino Sanz de Sautuola visitó por primera vez la cueva en 1875 y reconoció algunas líneas que entonces no consideró obra humana.

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¿Por qué es importante la cueva de Altamira?

A la cueva de Altamira le corresponde el privilegio de ser el primer lugar en el mundo en el que se identificó la existencia del Arte Rupestre del Paleolítico superior. Altamira fue también un descubrimiento singular por la calidad, la magnífica conservación y la frescura de sus pigmentos.