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¿Por qué no arranca mi auto cuando hace frío?
Una de las averías o problemas más comunes en época invernal es que el coche no arranca por el frío. ¿Por qué ocurre este hecho? La respuesta se encuentra en que el frío se introduce hasta lo más profundo de nuestro coche provocando fallos en la batería, los calentadores, las bujías o el aceite del motor, entre otros.
¿Qué le pasa a un carro que no quiere arrancar?
Cuando el coche no arranca, la causa más común suele ser un fallo en el suministro eléctrico. La corriente se genera en el generador eléctrico, se acumula en la batería y se transmite a través de la bobina de encendido y el distribuidor a las bujías en el compartimento de motor.
¿Cómo afecta el frío a los coches?
Los neumáticos perderán presión a razón, aproximadamente, de 0,07 bares por cada 5 ºC que descienda la temperatura, así que hemos de tenerlo muy en cuenta a la hora de ponernos en marcha, puesto que eso influirá definitivamente en la capacidad de agarre de estos.
¿Cómo afecta el frío al auto?
¿Por qué mi coche no arranca en frío?
En este caso, la mejor solución es cambiarla por otra nueva y olvidarse de problemas al arrancar el coche por unos años. Otra causa por la que un motor no arranca en frío son las bajas temperaturas ambientales: una batería fría tiene la capacidad de arranque muy inferior a la de una más caliente.
¿Cómo evitar los problemas de arranque en frío?
Otra excelente medida para no tener problemas de arranque en frío es cambiar de forma periódica los filtros de combustible y filtros de aire. Unos cristales limpios son fundamentales para mejorar nuestra seguridad en el coche, sobre todo en las horas del ocaso, el amanecer y por la noche.
¿Cómo afecta el frío al aceite del coche?
Si el coche lleva varias horas estacionado bajo el frío, el aceite, además de volverse más viscoso, desciende al cárter, es decir, queda muy lejos de la zona que debe lubricar. Si nada más arrancar revolucionamos el motor, y las piezas no están correctamente lubricadas, lo que estamos haciendo es desgastarlo y, con el tiempo, puede pasar factura.
¿Cómo cuidar el coche en invierno?
Que el coche esté resguardado en invierno y no esté expuesto al frío, lluvia, hielo, viento y nieve es un factor a tener en cuenta. Para ello lo mejor es que pase la noche en un garaje pero esto no es siempre posible.